Después de la gran época de navidad, llega la gran cuesta de enero, que recibe este nombre ya que después de un periodo vacacional donde el gasto ha incrementado notablemente en comparación con otro mes del año, nos encontramos con 20 días más de un mes, por lo que esto se hace poco llevadero y muy cuesta arriba.

Por ello es normal que después de este periodo uno se sienta más vulnerable, triste o ansioso, esto lo corroboran diversos estudios que notifican una subida del 40% en personas que aluden la necesidad de acudir a consulta, para resolver o adquirir herramientas que le ayuden con la cuesta emocional. Por esta razón, ahora es el momento no solo de que se recupere la economía, sino también de la recuperación emocional.

Existen hay varias estrategias que nos ayudan a sobrellevar esta época post vacacional de una forma más oportuna y manejable.

  • Planificar las compras y devoluciones, creando presupuestos y listas, para no caer tentados en el descontrol de las rebajas, evitando comprar cosas innecesarias.
  • Nuevos objetivos, planear metas concretas que se vayan a cumplir, debemos empezar por cosas pequeñas como, por ejemplo, hacer hoy la cena. Es preferible que crear un objetivo mayor que costara más finalizarlo. Siempre empezando de forma positiva y no como una obligación.
  • Otra forma de activar el buen humor después de la navidad, es la realización de actividad física, no tienes por qué machacarte todos los días con largos entrenamientos o clases, si no, un poco de actividad como ir andando al trabajo, o dar un paseo de 30/20 minutos. Lo ideal es caminar todos los días un poco ya que ayuda a pensar, a equilibrar la mente y ha sentirnos mejor con nosotros mismos.
  • También nos ayuda cambiar los muebles de sitio, es una actividad que fortalece el vinculo con tu hogar y es una actividad que se puede realizar en compañía, sin gastar dinero y divertida.
  • ¡Cambia tu rutina! No quiere decir que tires todo por la borda, pero cambia pequeñas cosas en tu rutina, por ejemplo, el horario de realizar las actividades, o el camino hacia el trabajo, el bolso que utilizas siempre para ir a la oficina o simplemente el supermercado al que vas. Es un pequeño cambio que conlleva una gran distracción y crea un ambiente nuevo en tu día a día.

 

 

Después de todos estos “tips”, es importante recalcar la importancia que tiene el profesional de la salud en estos casos, ya que son ellos los que van a profundizar más en caso que la cuesta de enero se haga mucha más cuesta mental. ¡No dude en acudir a Centro Intelecto para aplanar la cuesta mental!

 

Alba Quilimaco Fernández, Psicóloga